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* La normativa quedó sancionada el martes 6 de agosto, luego de ocho años de aprobarse en primera discusión, * Se deslindó de la concepción elitista del pasado, de allí el desconocimiento y ataques de Fedecámaras, fustigó la parlamentaria * Pluriculturalidad, plurilingüismo, corresponsabilidad e inclusión, entre otros elementos esenciales del nuevo instrumento jurídico.
La Ley Orgánica de Cultura forma parte del proceso socialista bolivariano, de allí que conciba la cultura como un derecho humano y no como un privilegio de élites, según la concepción del pasado cuartorrepublicano del país.
La reflexión pertenece a la presidenta de la Comisión Permanente de Cultura y Recreación de la Asamblea Nacional (AN), diputada Gladys Requena (Vargas-PSUV), entrevistada en el programa Parlamentando de ANTV.
Recordó que la herramienta legal se aprobó en primera discusión en 2005, y el proceso para estructurarla inició en el año 2000. Es una ley que reunió “diferentes sentimientos y aspiraciones”, celebró.
Una vez que se retoma el instrumento para llevarla a segunda discusión, en la jornada de consulta pública previa se contabilizan más de 8 mil registros de asistencia a la misma, indicó.
Requena condenó que Fedecámaras haya enviado un documento de nueve páginas con críticas de tipo económico a la Ley Orgánica de Cultura, que además contó con la respectiva vocería en la AN.
El tema del concepto de nación, de la venezolanidad, de la interculturalidad están en la normativa, y a esto se opone la derecha, dejó claro. Recordó el extinto Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes (Inciba), en cuyo nombre escudriñó para concluir que es excluyente según lo expresa el término “bellas artes”, es decir, nada importaban la creación de cultores y cultoras populares .
Ese organismo le da paso al Consejo Nacional de la Cultura (CONAC), también desaparecido, hasta que el Comandante Supremo crea el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, complementó la asambleísta bolivariana.
Sobre el Reglamento de la Ley Orgánica de Cultura, recordó que la reglamentación de las normativas está en manos del Ejecutivo, sin embargo, aclaró que en ningún caso se trata del “Estado perverso” –como lo califica la derecha, acotó- sino del Estado rector que impedirá, por ejemplo, privatizar la cultura, como en el pasado, cuando los teatros eran sólo para el disfrute de una minoría.
Pluriculturalidad, plurilingüismo, corresponsabilidad, inclusión, citó parte de los conceptos esenciales que definen el neonato instrumento.
En el caso de la corresponsabilidad, se refirió al fondo nacional que crea la ley, en cuya conformación participa la empresa privada cuyas ganancias anuales mínimas alcancen las 20 mil unidades tributarias (actualmente en Bs. 107). Este es uno de los aspectos que cuestiona Fedecámaras, criticó.
Reiteró que la ley es un homenaje al Comandante y manifestó su orgullo por la sanción de la misma el martes 6 de agosto.
ANTV/COP
