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La parlamentaria Gladys Requena recalcó que el traslado de la Kueka violó el culto sagrado de los pemones y las regulaciones de protección de Canaima como Parque Nacional.
La diputada Gladys Requena, y los diputados César Sanguinetti, Arcadio Montiel y José Luis González, viajan este jueves, 2 de agosto, al estado Bolívar para entregar a representantes del pueblo Pemón copia del acuerdo de repatriación de su piedra sagrada, la cual han denunciado como secuestrada desde 1998.
El encuentro entre la parlamentaria, los parlamentarios y el pueblo Pemón se realizará en Mapaurí, Santa Elena de Uairén, de donde fue sacada la piedra Kueka, en 1998, durante el gobierno de Rafael Caldera.
En el acuerdo, aprobado por mayoría parlamentaria el pasado 19 de junio, y publicado en la Gaceta Oficial N° 39.948 de fecha 20 de junio del 2012, se exhorta al Ejecutivo Nacional, a través del ministerio del Poder Popular para las Relaciones Exteriores, a realizar “las gestiones pertinentes ante el Gobierno de la República Federal de Alemania para la repatriación de este bien patrimonial”.
De igual manera, se insta a las autoridades nacionales a abrir una investigación sobre los hechos y personas que permitieron la extracción de la Piedra Kueka, acción calificada como forzosa e ilegal.
Según la leyenda, Kueka era un joven Pemón Taure Pam que se casó con la joven más bella de la comunidad Macuxi, lo que provocó la ira de Makunaima, dios Pemón, quien lo maldijo a vivir siempre abrazado a su esposa, convertido en piedra, por mezclar comunidades distintas. Hoy representa la abuela del referido pueblo indígena, la cual lo orienta en todo lo relacionado con el presente, el pasado y el futuro.
La diputada del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) por el estado Vargas, Gladys Requena, recordó que la piedra sagrada fue extraída de su lugar de origen en 1998 por el artista plástico de origen alemán, Wolfan Von Schwarzenfeld, para integrarlo a una instalación escultórica denominada Global Stone en el parque metropolitano de Berlín, Alemania, acto que violó el culto sagrado del pueblo Pemón, además de las regulaciones de protección de Canaima como Parque Nacional.
La entrega de la copia del acuerdo parlamentario al pueblo Pemón, constituye una garantía de su lucha sagrada.
