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Desde hace 12 años, cuando el Comandante Hugo Chávez arribó a la presidencia de la República, como resultado del inmenso respaldo de un pueblo que reaccionó contra un modelo político-económico excluyente para la mayorías y de reparto de privilegios para unos pocos y unas pocas, la revolución bolivariana ha consolidado logros sustantivos que constituyen una vitrina de dignidad, calidad de vida, desarrollo humano, solidaridad internacional, luz para la liberación de otros pueblos, guía para otros gobiernos, orientación para la nueva integración latinoamericana y caribeña.
Pero también es cierto que hemos tenido que sortear una apátrida conspiración en el campo económico, mediático y político, asociada al golpismo, al terrorismo, a la desestabilización; concebida desde los laboratorios del imperialismo norteamericano y ejecutada por quienes en el extranjero y en Venezuela le sirven de instrumento.
No obstante, el proceso revolucionario, sin prisa pero sin pausa, por la vía que hemos escogido, como es la vía pacífica y electoral, va camino al socialismo. Avanza hacia la construcción de zonas socialistas, hacia la construcción de una gestión pública socialista, de una institucionalidad socialista, de un ordenamiento jurídico socialista y hacia la construcción del modo de producción socialista, que privilegia el interés colectivo sobre el individual, la propiedad social sobre la privada, que garantiza una vida “humanamente gratificante” para nuestro pueblo y la finalidad social del excedente sobre la acumulación individual.
En esta hora, la revolución socialista bolivariana, las revolucionarias y los revolucionarios, nos preparamos para un nuevo desafío: conquistar una abrumadora mayoría, más allá de la mayoría calificada, en la asamblea nacional para el período 2011-2016. Por ello, la contienda electoral del 26 de septiembre tiene un significado táctico en función de nuestro gran objetivo estratégico en las batallas del porvenir: avanzar en la construcción del socialismo bolivariano, en la construcción de la patria nuestramericana y garantizar la victoria del Comandante Presidente, Hugo Chávez en el año 2012, como líder fundamental del proceso revolucionario, por su capacidad para interpretar los intereses de nuestro pueblo e impulsar desde su altísima responsabilidad, como jefe de Estado, políticas públicas que cada día reivindican los derechos fundamentales de todas y todos y generan condiciones que nos dignifican, enaltecen y humanizan.
Por ello, desde las filas del Partido Socialista Unido de Venezuela, desde los movimientos sociales paridos por la revolución, desde las misiones sociales que han tocado nuestras fibras más sensibles, desde el corazón y el cerebro de las revolucionarias y de los revolucionarios que participan en los Consejos Comunales, desde nuestra convicción que solo en el socialismo se resuelven los problemas de nuestros pueblo, asumimos este desafío, conectadas y conectados espiritualmente con nuestro líder, con la misión de no permitir ni un espacio para que la contrarrevolución nos quite nuestros logros y obstaculice el avance de nuestros sueños bolivarianos, zamoranos, robinsonianos, martianos .
No somos una, no somos uno, ni somos cien, somos mllones que estamos con él.
Patria Socialista o Muerte. Venceremos
Gladys Requena
Miembra del Buró Político del PSUV
Candidata Nominal a la A.N. Edo.Vargas
